lunes, mayo 19, 2008

Óscar Oliva

DERRUMBE


Es como tirarse a una lágrima,
con un saco de piedras
a la cintura.
Es como oler mal, como tener hambre.
Tal es la situación
del que aguarda que la ciudad
empiece a derrumbarse;
tal es el que con una pala
en la diestra y una pica
en la sombra va a meter
su propia alma a este derrumbe.

Por eso, cuando anochezco,
siento un fuerte dolor
que me hace trastabillar,
escucho la dinamita que estalla
salpicando mi cerebro en las paredes,
y entrar en la sublevación
que levanta tiesa llamarada.

Cuando el dolor se calma,
cuando una banderola me hace señas,
un gallo picotea mis astillas;
me incorporo y es la otra ciudad,
otra culebra cegándome
donde soy
el cometa
que viaja
fuera de su curso,
y que de pronto
se da cuenta
que ha llegado
a una estación
sin cráneo.

viernes, mayo 16, 2008

Óscar Oliva

EN UNA SOLA LLAMA


A Sonia

No hay nada sino dos seres desnudos y abrazados
Un surtidor en el centro de la pieza
Manantiales que duermen con los ojos abiertos

Octavio Paz


Cuando el mundo sabe a dónde va
Tú y yo abrazados
En el centro del cuarto
Que es una nave quemada
A punto de llegar al lirio
De pie
En el lugar donde hubo un bosque
Una palabra
Nos encontramos
Anticipándonos a la gran carrera
Donde nadie ha de avanzar un paso

En tanta libertad

Mis manos bajan hasta tus nalgas
Tus senos quieren liberarse de ti
Incrustarse en mi pecho
Morderme
Tu mirada de niña
Galatea escondida bajo la falda del placer
Se llena de crecientes tentáculos
Abrazados
Proyectamos el mundo a cada paso
El mundo que ansiamos desconsoladamente
Herido en las fábricas y en las selvas
Arrastrado como un roble
Por elefantes que lloran
Aprendiendo a olvidar los pantanos

En tanta libertad

A veces me olvido que estamos en guerra
En tus pezones brinca un ciervo
Todo yo te recorro
Con aperos de agua erizada
Todo yo te respiro
Bailamos pianos con pies de potros
Mis labios en tu cuello son dos islas
En tanta constelación mareada de jazmines
Mis manos bajan hasta la empuñadura de tu espalda

Ahora voy a rodear de eucaliptos tu cintura
De semen tus eucaliptos verdaderos
De sol tus planos arquitectos
Oh tú que eres Boticelli en un ramo
Sor Juana entre mis piernas

Hoy es tiempo de amar
La policía no podrá detenerme
Si digo que hoy es tiempo de amar
Alrededor del cuarto han crecido acacias
De dos en dos

El olor del mundo es con nosotros
Sólo sentimos el rumor de nuestras carnes
Tu organismo es un estanque que resuella

En tanta libertad

Abrimos la piel como puerta o manzana
Mi camisa cae al suelo
Súbito paracaídas para los títulos de los libros
Deja esa sábana en su equilibrio de espuma
No la toques
Mira mis manos
Cómo suben espantando las avezuelas de tus muslos
Ven
Deja es música en su velo egipcio
No la toques porque se derramaría
Voy a gaviar años en tu piel
Voy a escribir sobre ti

En tanta libertad

Mi pensamiento encima de tu pensamiento
Tus muslos al lado de mis caderas
Alegres
Y el jadeo
Nos movemos como en una gran carrera
Donde nadie ha de avanzar un paso
Todo yo te respiro
Mi lengua se humedece bajo el chorro de tu piel
Me siento vivir en todas las azoteas del mundo
Soy un coyote merodeando tu cuerpo
Un jabalí mordisqueando el maíz de tu vientre
Un quetzal en tu cuello
La cama es un valle
Un satélite de nuestro lenguaje
Es bella como trigal mecido por los cuervos
Por las olas de los cuervos que picotean
Granos enrojeciendo nuestros párpados

Algo se avecina en este movimiento
Soy un músculo más de tu garganta
Con un embudo de hojas
La palabra llega de rodillas al aposento
Abrazados
Abrazados
¿Qué reloj nos llama?
¿Cuánto tiempo ha transcurrido sobre nuestras antorchas?
A mi lado izquierdo sonríes
Yo te beso maligno
¿Recuerdas la semana pasada?
Hemos recuperado el habla

Mira el día
Asoma débiles garras por el resquicio del sueño

Y te beso

Aún en este mundo antiguo


jueves, mayo 15, 2008

ÓSCAR OLIVA



ÓSCAR OLIVA nació en Chiapas, México. Entre sus obras se encuentran: La voz desbocada (1960), Áspera cicatriz (1965), Estado de sitio (1971), Estado de sitio y otros poemas (1986), La realidad cruzada de rayos (1989), Trabajo ilegal (1994) y Lienzos transparentes (2003).


GÉNESIS

Desde el amanecer estoy construyendo esta ciudad, y no veo la hora de terminar. He sido albañil, escultor, astrónomo. La he desbaratado no sé cuantas veces, la he apuntalado con mis propios desvaríos. En estos momentos le he puesto una bocina para que hable. En esta oscuridad no distingo el andamio donde trabajo, y que ya no siento debajo de mí. No tengo ya fuerzas. Por mis calles corre el viento. Ya es tiempo de que termine de construir este hombre, de darle aceras y copas, pues me estoy quedando desierto, sin murallas ni templos. En la ancianidad palpo que no he superado mi condición de valle, las rocas se desmoronan entre mis dientes, los montes me cercan, reduciéndome. Al amanecer es posible que no sea más que una bestia en busca de alguien que destrozar.


martes, mayo 06, 2008

Octavio Paz, Corriente Alterna

¿Que nombra la poesía?

La dificultad de la poesía moderna no proviene de su complejidad –Rimbaud es mucho más simple que Góngora o Donne- sino de que exige, como la mística y el amor, una entrega total (y una vigilancia no menos total). Si la palabra no fuese equívoca, diría que la dificultad no es de orden intelectual sino moral. Se trata de una experiencia que implica una negación –así sea provisional, como en la meditación filosófica- del mundo exterior. Para decirlo de una vez: la poesía moderna es una tentativa por abolir todas las significaciones porque ella misma se presiente como el significado último de la vida y el hombre. Por eso es, a un tiempo, destrucción y creación del lenguaje. Destrucción de las palabras y de los significados, reino del silencio; pero, igualmente, palabra en busca de la Palabra. No faltará quien se encoja de hombros ante esta “locura”. Sin embargo, desde hace más de un siglo, algunos espíritus solitarios, entre los más altos y ricos de dones que hayan visto ojos de hombre, no han vacilado en consagrar su vida a esta empresa insensata.